viernes, 25 de enero de 2013

Las drogas del futuro; el futuro de las drogas

Hoy voy a empezar por la conclusión: sí, habrá drogas en las próximas décadas, y en los próximos siglos, también. Resulta difícil imaginar qué cambios drásticos se tendrían que producir en el comportamiento humano para abandonar unos hábitos que han perdurado durante milenios. En todas las civilizaciones y continentes, más "blandas" o más "duras", naturales o artificiales, populares o elitistas, permitidas o perseguidas, siempre ha habido sustancias que han distorsionado los sentidos y causado alucinaciones: percepciones o experiencias que se alejan de la realidad ordinaria. Y parece que está en la naturaleza humana el buscar ese tipo de sensaciones.
El "arbol" evolutivo de las plantas alucinógenas
 
Hay una explicación "naturalista" sobre su origen: El ser humano, a lo largo de su evolución, probó toda clase de plantas; unas le alimentaron, muchas se le indigestaron, otras curaron sus enfermedades y algunas le mataron. Algunas tenían extraños efectos en su cuerpo y en su mente.
 
En la actualidad, hay 120 plantas alucinógenas identificadas. De ellas, unas 100 son originarias de las Américas y sólo 15-20 de Eurasia. Se atribuye a esta distribución la mayor utilización de plantas alucinógenas en las tribus y poblaciones pre-colombinas, especialmente en ceremonias colectivas (vamos, que se fumaban en pipa todo lo que pillaban, no solo la Nicotiana Tabacum...).
 
Es curiosa la visión de la ciencia ficción sobre el futuro de las drogas:
 
- en Brave New World (Un mundo feliz) - (Aldous Huxley, 1932), el soma es el antidepresivo de uso generalizado en una sociedad superestratificada, desde los alpha dominantes a los epsilon embrutecidos. En algún momento dice que el soma "tiene todas las ventajas del cristianismo y del alcohol, sin ninguno de sus efectos secundarios". Por cierto, la Guerra de los Nueve Años, causa de la hecatombe mundial que propicia el nacimiento de una nueva sociedad, comienza en el año 141 d.F. (después de Ford, por el año de la fabricación del primer modelo Ford-T), o sea en 2049.
 
Alex y sus colegas en el Kolova Milk bar
- en The Clockwork Orange (La Naranja mecánica) - (Anthony Burgess, 1962), la combinación de leche con "vellocet", "synthemesc" y "drencrom" (drogas artificiales ficticias, de nombre parecido a algunas de las existentes en esos años)  produce unos episodios de ultraviolencia en sus adictos.
 
Kyle bajo los efectos de la "especia"
- en Dune (Frank Herbert, 1965), 20.000 años en el futuro, sólo en el planeta Arrakis se produce la Spice Melange, que alarga la vida, aumenta la vitalidad y, en ciertos individuos, induce la telepatía y la presciencia. Como efecto secundario, cambia el blanco de los ojos por un azul eléctrico, pero a Kyle MacLachlan  le sienta muy bien.
 
Pero pasemos de la ficción a la estadística. ¿Qué está pasando con el consumo de drogas y cuál sería una proyección razonable para las próximas décadas? Aquí nos ayuda la NIDA (National Institute on Drug Abuse) www.drugabuse.gov con la encuesta anual que realiza en USA. ¿Se pueden extrapolar los resultados al resto del mundo? Claramente, no. Pero son los datos más contrastados. Por ejemplo, el dato global: % de la población mayor de 12 años que habían consumido drogas "ilegales" en el último mes. Era el 8,3% en 2002 y el 8,7% (22,5 millones de estadounidenses) en 2011. O sea, que en términos globales, más o menos igual. Lo que cambia es la distribución.
 
Distribución consumo de drogas por edades en USA
Por ejemplo, entre 2007 y 2011:
Marihuana: de 14,4 millones de consumidores a 18,1 millones (notable subida). Hay que tener en cuenta que su consumo con fines terapéuticos ya es legal en algunos Estados.
Psicoterapéuticos (analgésicos, tranquilizantes, estimulantes o sedantes utilizados como drogas): más o menos estable en 6,1 millones.
Alucinógenos (incluye éxtasis y LSD): Ligero descenso, de 1,2 a 1,0 millones.
Cocaína: de 2,1 millones a 1,4 millones (notable bajada).
Meta-anfetamina: de 0,53 millones a 0,44 (también desciende aunque no mucho).
Heroína: de 0,16 a 0,28 millones (notable aumento, aunque sobre una población de partida muy baja).
La suma de consumidores por tipo de droga es mayor que el total de la población consumidora porque algunos se apuntan a varias.
 
Evolución del consumo a los 18 años en USA
Con el tabaco (que no se incluye en las estadísticas anteriores, porque su consumo es legal), se está produciendo un descenso muy claro. Del 26% de americanos que fumaban en 2002, ha pasado a un 16%. Y, mejor aún, en los jóvenes de 12-17 años, ha bajado del 13% al 8% (claro que, quizá, se han pasado a la "maría" - ver gráfico). Dato que contrasta con lo que se observa en España, donde a pesar de leyes, campañas y amenazas, los jóvenes siguen fumando en una proporción muy alta comparada con sus iguales europeos occidentales (En España, entre 18 y 29 años, fuman el 22,5% de los hombres y el 43% de las mujeres, según una encuesta de 2012 realizada por la Asociación para la Investigación sobre el Cáncer de Pulmón en Mujeres).
 
 A nivel mundial, la UNODC - United Nations Office on Drugs and Crime www.unodc.org , también publica estadísticas, la última con datos de 2010, pero es comprensible la dificultad de recoger y validar datos fiables en muchos países del mundo. De ahí que proporcione rangos. Por ejemplo,  estima que hay entre 153 y 300 millones de consumidores de drogas ilegales a nivel mundial. Entre 13,2 y 19,5 millones de consumidores de cocaína, y así. Quizá lo importante son las tendencias observadas:
- el consumo de drogas ilegales como porcentaje sobre la población de un país es mayor a medida que ese país es más desarrollado. Lo que anticipa un volumen importante de nuevos consumidores en todos los países en vías de desarrollo (cóctel explosivo de mayor población, población más joven, más urbana y con mayor papel de la mujer en la sociedad).
- la cocaína y la heroína continuarán descendiendo, en términos relativos de consumo.
- el cannabis (marihuana) seguirá siendo la droga de mayor consumo, e incluso ganará "cuota de mercado". Está por ver la evolución de su consideración como ilegal/legal.
- continuará creciendo también el uso de medicamentos de forma inapropiada y aparecerán nuevas drogas sintéticas, a saber con qué efectos.

El que quiera consultar el informe completo "World Drug Report", aquí va el enlace:
http://www.unodc.org/documents/data-and-analysis/WDR2012/WDR_2012_web_small.pdf

En resumen, lo que decía al principio: seguirá habiendo drogas, más o menos legales o ilegales, naturales o artificiales, baratas o caras, para unos pocos o para el común de los mortales. A nivel particular, tendremos que reforzar la información, la educación, la prevención y, sobre todo, la responsabilidad para controlar su influencia en nuestro entorno cercano. Y asumir su presencia.
 
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 Mi reconocimiento y agradecimiento a Pedro Roy, inspirador de esta entrada. He tocado sólo la superficie del tema; con las líneas de investigación que me ha propuesto, da para muchas entradas... seguiremos trabajando en ello.

7 comentarios:

  1. Me gustaría saber que opináis, seguidores de este blog, sobre la legalización del consumo de drogas. Por mi parte, que soy eminentemente liberal, estoy a favor de una liberalización controlada.

    Yo no soy un experto, aunque alguna vez he fumado un porrete, porque en mi época no pasábamos de las pipas de girasol, del tintorro o, como mucho, del cubata. Conservo, con moderación pero tambien con entusiasmo, los tres vicios.

    El consumo del alcohol y del tabaco está permitido en muchos países, pese a que. superando ciertas cantidades y a largo plazo, todo el mundo sabe que son perjudiciales. Por coherencia, las drogas de intensidad y/o efedctos similares al alcohol o el tabaco podrían igualmente legalizarse.

    La liberalización no puede ser generalizada, en la medida en que hay drogas de efectos directos y secundarios muy agudos y/o desconocidos. Otras, pienso, son lo suficientemente leves como para permitir probarlas, conocerlas, evaluar sus efectos, ajustar el consumo o abandonarlo antes de sufrir consecuencias irreparables.

    Está claro también que la prohibición propicia el mercado mafioso y guerras sangrientas como en México

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  2. Tema controvertido donde los haya, Telmo. Soy partidaria de la legalización pero, al mismo tiempo, me parece que si no se regula de forma muy, muy seria (y en este país la seriedad siempre es de risa) y se acompaña de una educación para la prevención del consumo que sea eficaz e información a la población suficiente y veraz, puede tener un efecto descontrolado en la juventud.

    Muchas personas confunden lo legal con lo bueno. Es decir, se guían por la premisa (más bien la etiqueta) de “si es legal, es bueno”, y podría dispararse el consumo entre la juventud si, como digo, no se acompaña de otras medidas que fomenten lo contrario. Sucede con el tabaco y el alcohol, las dos drogas legales en nuestro país, las dos que más se consumen, y las dos con efectos muy nocivos, que sin embargo culturalmente están muy aceptadas, tanto que cuando salió la ley que no permite fumar en sitios públicos se puso el grito en el cielo, y se sigue cuestionando, después de años en vigor. Porque esa es otra, una cosa es legalizar el consumo y otra dónde se consume. Desde luego este tema da para mucho, y lo dice una adicta al tabaco. Bueno, hace diez años que no fumo, pero seguiré siendo fumadora hasta que me muera, porque estoy segura de que si doy una miserable calada vuelvo a las andadas en cuestión de horas. Llevaba fumando desde los 16 y no cuento lo que me costó dejarlo para que no se asuste quien esté pensando hacerlo. Lo importante es que pude, o sea, que se puede.

    Si se legaliza, se recaudarían impuestos de ese millonario negocio. Ahora que hace falta dinerito para sanidad y educación, lo mismo alguien se lo propone al gobierno… (qué tos me ha entrado... de exfumadora)

    Dejo dos enlaces interesantes de la Fundación Pfizer, que realiza estudios sobre alcohol y tabaco en jóvenes muy rigurosos, que dan una idea de cómo está el patio juvenil.

    http://www.fundacionpfizer.org/docs/pdf/foros/Estudio_Juventud_Tabaquismo_17_nov.pdf

    http://www.fundacionpfizer.org/docs/pdf/Foro_Debate/Estudio_Juventud_Alcohol.pdf


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  3. En línea con la famosa frase atribuida a Einstein (y a varios más)de "Si quieres resultados distintos, tendrás que hacer cosas distintas", otro voto por la legalización controlada. Aunque, evidentemente, debería ser una iniciativa a nivel mundial, lo cual complica mucho la cosa.
    Podría haber otra alternativa, y ya la explora Frederick Forsyth en su novela Cobra (2010): El Presidente de EE.UU. le encarga a un ex-espía la destrucción del comercio mundial de cocaína. Sin límite de medios ni de presupuesto. Y el agente Paul Deveraux se pone a ello... No cuento el final para los que no la han leído. Muy interesante y sugerente.
    Parece que así, con métodos "expeditivos" a nivel individual, es como China consiguió reducir de manera drástica los, se dice, más de 70 millones de yonquis adictos al opio, morfina y heroína que había en el país antes de 1949. Pero me temo que, con el desarrollo reciente, habrán vuelto a surgir nuevos hábitos de consumo de quizá otros tipos de estimulantes.
    Insisto en lo que para mí es fundamental en este tema: información (objetiva), educación (temprana), regulación (proporcionada) y responsabilidad (individual y colectiva).

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  4. me podrias decir en que drogas se basan los nombres de la leche plus?
    graicas de antemano

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    Respuestas
    1. Hola Augusto.
      El synthemesc sería el synthetic mescaline, o mescalina sintética, un tipo de alucinógeno. El drencrom se refiere al adrenochrome, un psicótico. El vellocet puede referirse a un opiáceo (percocet) o a un tipo de anfetamina (por su semejanza con velocity - speed).
      Un saludo,

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    2. muchas gracias
      mescalina y anfetas consigo y opiaceos tambien
      pero mezclar un alucinogeno tan potente, con anfetas y un opiaceo que basicamente son opuestos a la anfeta no tiene el absoluto sentido xD
      con mis amigos queriamos probar la leche esa :_

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    3. Augusto,
      Deja los experimentos para los libros de ciencia ficción.

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