Elizabeth Holmes |
Elizabeth Holmes (Washington DC, 1984). Elizabeth con todas las letras, nada de Eli, Liz, Lisa, Lissie. Claro que, mirándola a los ojos, de un azul intenso, está clara su fuerza de carácter y determinación. Por encima de su aspecto frágil, de la engañosa apariencia de "niña bien". Y es que, con 30 años recién cumplidos, está en vías de zarandear a la colosal industria de los análisis clínicos, que sólo en EE.UU., supone un volumen de facturación de $73.000 millones, que realiza alrededor de 10.000 millones de análisis por año y que proporciona la base para el 70% de las decisiones médicas.
Y todo porque su compañía, Theranos (www.theranos.com) nombre que al parecer viene de una mezcla de "terapia" y diagnóstico", ofrece hasta 70 diferentes tipos de análisis de sangre a partir, y aquí viene la innovación disruptiva, de una muestra de 25-30 microlitros (1 microlitro es una millonésima de litro), lo que viene a ser unas cuantas gotas que se extraen mediante un pinchacito en el dedo. Lo que hasta ahora implicaba una extracción en toda regla (con el conocido, y temido, ritual de jeringuilla) de unos 3.000 a 5.000 microlitros. O sea, de 100 a 200 veces más de sangre. Por eso digo que esta mujer nos va a ahorrar mucha sangre (y mucha tensión, añado).