Y la Princesa no encontró rana a la que besar...

Bd, el asesino de ranas

Por si no bastara con la misteriosa desaparición de abejas que lleva años produciéndose (ver detalles aquí), parece que ahora nos tenemos que empezar a preocupar también por las ranas. Pero, en este caso, el causante ya está identificado: Se trata del hongo Batrachochytrium dendrobatidis (Bd para los amigos). Que fue aislado y bautizado en 1999, y del que se estima que está causando en todo el mundo la extinción de unas 2.000 especies de anfibios (un tercio del total).

 

Parece que el "angelito" es originario de Sudáfrica, donde era una infección estable en las poblaciones silvestres de la rana africana de uñas Xenopus laevis. Pero, como sucede más a menudo de lo deseable, al sacarle de su hábitat natural y ponerle en contacto con otras especies de anfibios del planeta, se rompe lo que era un equilibrio más o menos estable y se lía la mundial, y nunca mejor dicho.

 

Aunque no está del todo confirmado, todo apunta como causante de esta propagación del hongo (y de la enfermedad que produce, la quitridiomicosis)  a la utilización de esta variedad de rana en los test de embarazo que, partiendo de su descubrimiento en Sudáfrica en la década de los 30 del siglo pasado, se extendieron a todo el mundo, y que usaban precisamente a la Xenopus laevis como "agente" del test.

 

(Paréntesis amplio: el "test de la rana" consistía en inyectar, debajo de la piel del animal, orina de la mujer que quería saber si estaba embarazada. Cuando una mujer está embarazada, su orina contiene una hormona característica, la HCG (Human Chorionic Gonadotropin). Esta hormona estimula la ovulación de la rana, que desova en 24 horas, y puede seguir sirviendo para tests posteriores.

 

La Dendrobates auratus, en peligro de extinción

Es curioso que ya en el antiguo Egipto existía un conocido "test de embarazo", consistente en llenar con orina de la mujer un recipiente con semillas de trigo y cebada. Si germinaba sólo la cebada, el embarazo era de un varón; si germinaba sólo el trigo, era una hembra; si no germinaba nada, no había embarazo. Ahora sabemos que la razón de estos efectos residía en la acción de la hormona HCG sobre las semillas de los cereales. Estudios recientes han estimado el grado de acierto de este test en un 70%.

 

Los test actuales de predicción de embarazo se basan en el mismo principio, la detección de la hormona HCG, aunque ya no hace falta tener una rana en casa... El primer detector "casero" fue patentado por la bioquímica americana Margaret Crane en Nueva York en 1968. Cierro paréntesis).

 

Pero, volviendo a las ranas, hay algo que a muchos investigadores no les cuadra. Y es que, mientras que la proliferación a nivel mundial de los "test de la rana" tuvo lugar en los años 40, 50 y 60 del siglo pasado, ha sido en los último treinta años (es decir, a partir de los 80) cuando se ha producido la pandemia de quitridiomicosis. Una explicación alternativa es que, efectivamente, el hongo salió de Sudáfrica y colonizó a otras muchas especies a lo largo de los años, pero que no desarrolló su dimensión "letal" hasta que, por cambios medioambientales causados por el hombre en sus hábitats, el sistema inmunológico de los anfibios ha ido perdiendo fuerza y finalmente ha sucumbido ante el agresor.

 

Mapa de la distribución actual del hongo Bd

 

Porque Bd es "Terminator". Cuando infecta a una rana, el hongo se extiende por toda la piel y la va convirtiendo en una coraza, lo que ocasiona su muerte en pocos días, dado que estos animales beben, respiran y adquieren sales vitales a través de la piel. En esta página web de "Amphibian Ark" puedes encontrar mucha más información sobre el hongo, su origen, sus características y su forma de actuar. 

 

¿Y qué se puede hacer? Las investigaciones para contrarrestar el impacto de esta "plaga" se dirigen a potenciar la respuesta inmune de los individuos afectados, usando las esporas muertas del hongo como una especie de vacuna. También se está estudiando por qué hay ciertas especies de rana, como la rana toro (Lithobates catesbeianus)  y la propia Xenopus laevis que, hoy por hoy, siguen siendo inmunes.

 



De beso, nada

Esperemos que estos estudios den resultado porque, si no, habrá que encontrar unos nuevos Hermanos Grimm que re-escriban el cuento de "El rey rana o Heinrich el fiel", porque ya no quedarán ranas a quienes las princesas puedan besar y se conviertan en príncipes de "bellos y amables ojos". (Por cierto, en la versión de este cuento que he consultado, y se supone que es la original, el protagonista ya es un rey, no un príncipe, y no hay nada de beso, sino que la princesa "cogió a la rana con dos dedos y la llevó arriba, y cuando ya estaba acostada,... la lanzó con todas sus fuerzas contra la pared.

 -¡ Ahora sí que tendrás descanso, rana repugnante!

Pero lo que cayó al suelo no fue una rana muerta, sino un joven príncipe, vivo de bellos y amables ojos que...). Cuentos de niños...

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Gracias a Luis Miguel Ariza por darme la pista para este post con su artículo "El hongo asesino de ranas" publicado en El País Semanal el 08.02.2015