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Greg Rutherford, campeón en Pekín con 8,41 metros |
Cuando el barón Pierre de Coubertin dijo lo de "Citius, Altius, Fortius" (más rápido, más alto, más fuerte) en la inauguración de los primeros Juegos Olímpicos de la era Moderna, en Atenas, en el año 1896, dejó fuera un hipotético "Longius" (más lejos), que podría representar a las distintas disciplinas deportivas que consisten en llegar lo más lejos posible, bien con el propio cuerpo (salto de longitud, triple salto) o con algún objeto (lanzamiento de peso, disco, martillo, jabalina). Anécdota sin más. Pero que me sirve para dar entrada al análisis de la evolución y posible proyección futura de una de ellas, el salto de longitud. Porque, en este caso, parece que hemos tocado techo (o, mejor dicho, "muro"). Me explico.
Se acaban de clausurar los Campeonatos Mundiales de Pekín 2015. La medalla de oro en esta disciplina ha sido para
Greg Rutherford, de UK, con un registro de 8,41 metros. Si consultamos la completísima web
www.alltime-athletics.com/mlongok.htm podemos ver que la primera vez que se superó esa altura fue en Julio de 1975, por el atleta yugoslavo
Nenad Stekic (saltó 8,45). Hace 40 años. Pero es que el mismo Greg fue campeón olímpico en los Juegos de Londres de 2012 con un 8,31 m., la marca olímpica más baja desde 1972.