Luke y el Robot cirujano |
Casi al final del Episodio V de La Guerra de las Galaxias ("El Imperio Contraataca" - 1980), hay una escena donde un robot (de aspecto horrible, por cierto), implanta un brazo biónico a Luke Skywalker, que lo había perdido en una larguísima batalla contra Darth Vader. En dos minutos, plis plas, y los dedos ya se mueven como si tal cosa. Cosas de la ciencia ficción... ¿o no?.
La verdad es que la cirugía asistida por ordenador va avanzando de manera inexorable y, quién sabe, tal vez en las próximas décadas podamos llegar a ver escenas como la de "Star Wars".
El referente actual en este tipo de tecnologías es Intuitive Surgical (www.intuitivesurgical.com). Empresa cotizada en el NASDAQ (ticker ISRG, por si alguno se anima a comprar acciones). Facturó en 2011 $1,760 millones, lo que representó un incremento del 24% sobre 2010. Está en Sunnyvale, California, y su lema es "Taking surgery beyond the limits of the human hand".
El Sistema "da Vinci" de Intuitive Surgical |
Su sistema "estrella" es el "da Vinci", compuesto por un robot con 4 brazos articulados, una consola y un servidor. Se lanzó en 1999 y en estos momentos su base instalada es de cerca de 2.500 unidades. Y eso que cuesta $2,3 millones (para hacernos una idea, se podrían comprar 7 con la cuenta suiza de L.B.). Se utiliza en laparoscopias (operaciones en la cavidad abdominal), toracoscopias (en la cavidad torácica), y también en urología, pediatría, ginecología, etc...
Se trata de "telecirugía", o cirugía mínimamente invasiva asistida por robots. El cirujano humano (imprescindible por ahora), obtiene en la consola una visualización 3D de alta definición de la zona a operar, y mediante controles muy sensibles, mueve los brazos robóticos con gran precisión. Al hacerse todo ello a través de unas incisiones de 1-2 cm, se consigue una menor tasa de infecciones y complicaciones postoperatorias, una menor necesidad de transfusiones de sangre, una menor necesidad de tratamiento del dolor, unos cuidados más sencillos y, como consecuencia de todo ello, una menor duración de la estancia hospitalaria, aun en operaciones complejas.
Linda y su prototipo Sofie |
El "da Vinci" tiene una pega (al menos): Que no da feedback táctil, sólo visual, lo que representa un hándicap para el cirujano tradicional, acostumbrado a "sentir" lo que toca. Pero para solucionarlo viene Linda van den Bedem, de la Eindhoven University of Technology, quien en su tesis doctoral de 2010 desarrolló un sistema robótico que proporciona feedback táctil y de resistencia. Se llama Sofie ("Surgeon's Operating Force-feedback Interface Eindhoven"), y opera mediante unos controles tipo joystick que son más o menos fáciles de mover en función de la presión ejercida sobre el tejido del paciente. Se trata de un diseño básico, que puede estar disponible comercialmente para 2016.
También se critica a Intuitive Surgical que siga un poco el modelo Apple: Hardware y software propietario, que se vende como un sistema operativo cerrado (aquí tiene guasa lo de "sistema operativo"). Y para llevarle la contraria está Applied Dexterity Inc.: (www.applieddexterity.blogspot.com/ ), que propone una plataforma de investigación "open source" llamada Raven, donde los desarrolladores de software pueden incorporar sus modelos y probar sus invenciones.
Plataforma Raven |
Claro que un primer reto para la telecirugía es "alejar" al cirujano de la sala de operaciones. Y no a su despacho, sino a kilómetros de distancia del paciente. ¿Cirujano de primer nivel en una sala del Gregorio Marañón, por ejemplo, operando a un paciente en el quirófano del Hospital General de Segovia? La tecnología está ya disponible, si bien en lo que respecta a las telecomunicaciones, habría que garantizar una fiabilidad 100% (aunque un cierto soporte médico local siempre debería estar disponible, "just in case"). Curiosamente, Intuitive Surgical insiste en su página web en que esta opción no entra en sus planes actuales de desarrollo del negocio.
Otra línea de desarrollo de sistemas "robotizados" en tratamientos médicos se está empezando a aplicar en oncología, en lo que se llaman terapias fotodinámicas. En ellas, un láser robotizado se dirige con gran precisión a las células malignas del paciente, activando un fotosensor que previamente se le ha inyectado. Al activarse, causa la destrucción de esos tejidos. La Universidad del Líbano es pionera en este tipo de sistemas. Aquí se puede ver: http://sine.ni.com/cs/app/doc/p/id/cs-768
No sé, me da la sensación de que sistemas de apoyo al cirujano sí que los veremos, cada vez más sofisticados y a un ritmo de puesta en "operación" cada vez mayor, pero que le lleguen a sustituir de manera absoluta, creo que va para más largo. Quizá para cuando el Imperio contraataque...
No sé, si a mí ya me da pavor ponerme en manos médicas, no digo nada lo de ponerme en manos robóticas sin más. Con lo que falla la informática... A ver cómo se resetea un robot en medio de una operación. Lo del apaga y enciende me temo que no le iría muy bien al paciente.
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