viernes, 19 de septiembre de 2014

Avances muy prometedores en el control de la tartamudez

Jorge VI y el Sr. Logue
Los que hayáis visto la película El Discurso del Rey (The King´s Speech, 2010), ganadora de 4 Óscars en ese año, seguramente recordáis la angustia que transmite en las escenas iniciales el entonces Príncipe Alberto, Duque de York y futuro Jorge VI, al ser incapaz de pronunciar de forma mínimamente correcta, debido a su aguda tartamudez, el discurso previsto para la clausura de la Bristish Empire Exhibition de 1925.
 
Toda la película se basa en cómo el futuro Rey aborda el proceso de control de esa disfunción del habla, con la ayuda de un fonoaudiólogo australiano, Lionel Logue. Con sus avances y retrocesos, con el apoyo de unos y el escepticismo de otros, en unos momentos de gran relevancia histórica. (Aunque, para ser fieles con la Historia, parece que los hechos no sucedieron tal y como se reflejan en la película; que la relación del Príncipe con el Sr. Logue empezó en 1926, que el progreso del Príncipe fue rápido y efectivo y que, para los años del comienzo de la guerra, cuando el famoso discurso de 1939, apenas si tenían ya relación, dado que no se necesitaban sus servicios).
 
Pero lo que sí se refleja bien en la película es que 1) la tartamudez no tenía, ni tiene hoy por hoy, "cura" definitiva y 2) que el "control" de la tartamudez, que otra cosa no se puede pretender, resulta de la combinación de aspectos físicos (fundamentalmente la respiración, como enseguida veremos) y psicológicos.
 
La tartamudez no es una enfermedad. Es un trastorno de la comunicación, no del lenguaje. Se estima que afecta al 1% de la población (70 millones de personas en números redondos); al 5% de los niños (por las cifras se ve que para muchos de ellos es un trastorno temporal, que desaparece o se mitiga con los años). Es bastante más frecuente en hombres, hasta 4 veces más, que en mujeres. Y se suele manifestar a los 4-5 años de edad (como bien dice la película, ningún niño es tartamudo cuando empieza a hablar).
 
Algunos se lo toman con humor
¿Causas? Pues hay teorías y estudios para elegir: alteraciones genéticas, diferencias estructurales en el cerebro, mayor actividad del hemisferio derecho del cerebro, sede de las emociones, que interfiere con la "producción del habla" que se da en el hemisferio izquierdo, déficits auditivos, elevados niveles de producción de dopamina, etc... Lo que sí parece es que, cualquiera que sea la o las causas "físicas" que lo originan, cuando se le añade el componente "social" de sorpresa, rechazo e incluso burla (cuántos chistes de "tartajas" hemos tenido que escuchar), se produce una espiral negativa que daña la autoestima y la autoconfianza y produce situaciones de angustia y estrés que agravan el trastorno.
 
Por tanto, y como ya he comentado, todas las aproximaciones para controlar episodios de tartamudez combinan las técnicas físicas con aspectos psicológicos que tratan de revertir esa espiral.
 
¿Y qué es lo que me ha llamado la atención para traer este tema a este blog del futuro? Pues un artículo leído casi de casualidad al final de Agosto, donde se hablaba de un documental que acababan de echar en el Channel 4, titulado "Stammer School - Musharaf finds his voice". Me llamó la atención el testimonio de Adam Black, ahora un joven profesor de 24 años que decía "mi tartamudez era tan aguda que me tuve que poner un nombre nuevo, incapaz de decir el mío". Y ahí leí por primera vez sobre el McGuire Programme  (www.mcguireprogramme.com ), que le había ayudado a controlar su trastorno.
Dave McGuire
 
Si entráis en la página web, la impresión es que no hay nada "nuevo": combinación de concentración, respiración diafragmática (costal), no evitar las situaciones de angustia sino enfrentarse a ellas, etc... Pero parece que han dado en el clavo con cómo enfocan su programa.  En un intensivo residencial de 4 días  (el Príncipe Alberto y el Sr. Logue tuvieron 82 sesiones de terapia a lo largo de 10 meses) consiguen resultados espectaculares. Mirad la historia de Musharaf Asghar, estudiante de 17 años,  y de otros compañeros en el documental. El punto de partida de Musharaf es patético; incapaz de decir su nombre, ni de casi articular dos palabras seguidas. Y quiere ser profesor de escuela...
 
Son 47 minutos, pero merecen la pena. Eso sí, os recomiendo tener el paquete de Kleenex a mano:
 
Por algún lado he leído que el órgano oficial de los "expertos" en la materia del Reino Unido, los "Licensed Speech Pathologists", no acaba de dar su aprobación a este programa. Si los resultados son como aparecen en el documental y en los testimonios recogidos en la página web, y son sostenibles en el tiempo, ya están tardando.
 
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El primer tartamudo del que se tiene noticia fue Moisés, si atendemos a lo que pone la Biblia: "Moisés dijo a Yahvé: Pero, Señor, yo no soy hombre de palabra fácil,...  pues soy torpe de boca y se me traba la lengua" (Éxodo, 4 - 10).
Demóstenes, el Emperador Claudio, Miguel de Cervantes, Lewis Carroll, Charles Darwin, Winston Churchill, James Stewart... están en la lista de "tartamudos ilustres".

Última hora:  Este domingo, 21 de Septiembre, emiten en Antena 3 la película "El Discurso del Rey". Si no la habéis visto, os la recomiendo. Y si podéis verla en versión original, mejor.

3 comentarios:

  1. Demóstenes tampoco lo tuvo fácil...

    Elías

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  2. Interesantísimo, Ángel. No sé si este programa será la solución definitiva para la tartamudez. Cada persona somos una entidad diferente y lo general funciona con bastantes sujetos, pero no con todos. El tiempo y los resultados dirán.
    En 2006 hubo un ciclo de conferencias "El enigma escrito. Escrituras sin descifrar", en la Facultad de Filología de la Complutense y en el marco de la Semana de la Ciencia (lineal A, disco de Festo, escritura paleohispánica suroccidental, gublita, escrituras protosinaíticas, protoelamita y escritura del valle del Indo). Tengo algunos apuntes de las ponencias, resultaron muy ilustrativas, ya que eran divulgativas y aptas para casi cualquier público al que interesara un poco la materia (sin que se tuviera que contar con extensos conocimientos). Bien, pues la ponencia del disco de Festo, a mi juicio la más amena, la más cercana al público, muy bien llevada, atractiva y, a la vez, con dosis de humor (tan imprescindible siempre) la impartió un profesor de la Universidad de Alicante tartamudo. Tenía su método para no “atascarse”: él no leía cuando hablaba, pero si se “atascaba” rápidamente fijaba su vista en el papel, y debía saber por dónde iba, porque era la lectura la que lograba desatascarle y el lenguaje se volvía de nuevo fluido. Un erudito en la materia, y muy buen conferenciante, un genial comunicador a pesar de su tartamudez, o quién sabe si gracias a ella.

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    Respuestas
    1. Muchas gracias Charo. Me tengo que enterar qué es esto de "lineal A, disco de Festo, escritura paleohispánica suroccidental, gublita, escrituras protosinaíticas, protoelamita y escritura del valle del Indo" que suena superinteresante!!!
      En cuanto a lo que son las prioridades de esta sociedad, el domingo por la noche, mientras echaban en Antena 3 "El Discurso del Rey" el "trending topic" nacional en Twitter era Gran Hermano-15... En fin, queda mucho por hacer...

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